Un bingo bailable y millonario fue la antesala del ataque que las disidencias del Estado Mayor Central de las Farc lanzaron en la madrugada ayer contra la estación de Policía en Morales (Cauca). Los ilegales habrían aprovechado el evento masivo para camuflarse entre los civiles y alistarse para el atentado.
“Eran la seis de la mañana cuando se escuchó la primera explosión, sonó relativamente suave. Pero cinco minutos después se escuchó un bombazo que hizo estremecer a todo el pueblo”, relató un líder de la zona que pidió reservar su nombre.
Los 17 policías que estaban en la estación resistieron por dos horas y media los ataques de los hombres del Frente Dagoberto Ramos del EMC.
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A esa hora de la mañana muchos de los habitantes del pueblo pasaban el guayabo de un bingo millonario que se extendió –con licor y música en vivo– hasta las 3:00 de la mañana. Otros, apenas se levantaban para abrir los negocios o ir al colegio.
Las disidencias del EMC, documentó la Fundación Paz y reconciliación, están presentes en 41 de los 42 municipios del Cauca y han convertido a ese departamento en un cóctel de conflictos en los que se enfrentan, al tiempo, con la Fuerza Pública, el Eln y la Segunda Marquetalia.
Operación “Cabayo de Troya”
Los disidentes se habrían aprovechado del bingo bailable para camuflarse entre la población civil y preparar el ataque. Así lo narró el líder de la zona.
“El día de ayer (domingo 19 de mayo) hubo un bingo millonario, llegaron 60 chivas de todo lado del departamento. Los grupos insurgentes aprovecharon para camuflarse como civiles en medio de la gente. Después, llenaron el municipio de sus hombres con armamento y tatucos”, detalló el líder y habitante de Morales.
El bingo fue todo un acontecimiento para el pueblo. Se promocionó en redes sociales y emisoras. El voz a voz hizo que habitantes de otros pueblos se enteraran y acudieron a Morales para tratar de pescar algo de suerte.
La publicidad del “Mega Bingo” prometía la entrega de premios en efectivo de hasta cinco millones de pesos, televisores, neveras y hasta motocicletas.
“Entregaremos espectaculares motos cero kilómetros. Una Dominar 400cc, una Yamaha XTZ 150cc, una MRX Arizona 200 cc, una moto crypton, una DR 150 cc de Suzuki, una TT 200 y dos motos Tvs Raider”, se escucha en la promoción del bingo que fue organizado por el empresario Bertil Eduardo Chelito.
El evento afirmaba que entregaría 42 premios y el costo era de 60.000 pesos por tabla, con esa tarifa también garantizaban el transporte.
Esta redacción intentó comunicarse con el empresario organizador, pero no obtuvo respuesta.
Nelson Guetio, líder indígena y habitante de Morales, narró, por su parte, que hasta el pueblo llegaron chivas desde Popayán, Cajibío y de todos los corregimientos. La parranda inició al medio día y se extendió hasta las 3:00 de la madrugada.
“Cuando la gente del pueblo se fue a descansar, en la calle quedaron rondando extraños. Ahí, los guerrilleros aprovecharon para alistarse y a las seis en punto fue la primera explosión”, puntualizó el líder.
Horas de terror
Los habitantes de Morales empezaron a transmitir –casi que en vivo– el intento de toma guerrillera. Las imágenes parecían sacadas del archivo histórico de hace 20 años: ilegales patrullaban mientras lanzaban cañonazos contra los policías que resistían al interior de la estación.
–Estoy en tierra, necesitamos apoyo aéreo urgente. (...) nos acaban de atacar en la estación.
–QAP compañero, confirme, ¿tiene novedades del personal?
Ese es un aparte de una conversación radiotelefónica entre un policía de la estación de Morales con su superior. Fue interrumpida por las balas.
–Mi sargento, me dieron. Mi sargento, no me deje morir. Mi sargento, por favor, colabóreme con el apoyo a tierra. No me dejen morir.
Las Fuerzas Militares enviaron un helicóptero al pueblo, pero tuvo que abandonarlo debido a que fue alcanzado por las ráfagas de los fusiles guerrilleros.
“Los policías deben estar confiados que no los vamos a dejar solos, los refuerzos van a llegar, esta situación está siendo atendida con prioridad”, decía el ministro de Interior, Luis Fernando Velasco.
En medio de los enfrentamientos fallecieron los patrulleros Jaime Andrés Calderón Reyes de 25 años y Diego David López Domínguez de 26 años.
“Murieron dos civiles. Ambos eran comuneros de los cabildos de Honduras y Nuevo Horizonte. Uno quedó en medio del enfrentamiento y el otro estaba detenido en la estación de Policía cuando fue alcanzado por las balas”, señaló el líder indígena, Nelson Guetio.
Mientras ocurrían estos ataques, los disidentes también trataron de tomarse una guarnición oficial en el municipio vecino de Suárez (Cauca).
Los subversivos, en Morales, volaron con explosivos el cajero del Banco Agrario. Se robaron unos 50 millones de pesos y destruyeron locales comerciales.
Hacia las 9:14 de la mañana de ayer, el Ejército confirmó que había recuperado el control del casco urbano de Morales.
“Las tropas y vehículos blindados se encuentran en el casco urbano para contrarrestar estas acciones, las cuales están siendo apoyadas desde el aire con aeronaves artilladas del Ejército y la Fuerza Aérea”, detalló la Tercera División en un comunicado.
El Bloque Occidental del EMC está comandado por alias Iván Mordisco, cabecilla que se apartó de la mesa de diálogos con el Gobierno Nacional. Esta célula insurgente tendría bajo su poder a 2.400 hombres.
El presidente Gustavo Petro, el pasado 17 de marzo, decidió suspender el cese al fuego con este bloque guerrillero y desde entonces hay una lucha frontal entre la Fuerza Pública y los disidentes en los departamentos de Nariño, Valle y Cacua.
“Sin condiciones de desescalamiento efectivo de violencias, es imposible pensar en diálogos humanitarios o en cualquier tipo de conversación que vaya encaminada a crear un mejor ambiente en el departamento del Cauca”, señaló en sus redes sociales Camilo González Posso, jefe negociador del Gobierno ante el EMC.
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En todo caso, el presidente Gustavo Petro parece que ya se agotó de buscar una salida negociada con los ilegales del EMC y pidió una “ofensiva total” contra esos guerrilleros.
“Es inaceptable la situación en el Cauca. No toleraremos que se siga atemorizando a la población con atentados terroristas. (...) La ofensiva contra el EMC en el Cauca es total”, señaló Petro en sus redes sociales.
La primera orden del presidente fue la de realizar un consejo de seguridad de urgencia en el Cauca. En medio de la reunión, el Minsiterio de Defensa envió un pelotón de soldados profesionales para reforzar el dispositivo de seguridad en Morales.
Hacia las 8:00 de la noche de ayer, la comunidad de Morales permanecía en sus casas. Miraban por las ventanas cómo el Ejército recogía los restos de explosivos que dejó el ataque de los disidentes. El alcalde del pueblo, Oscar Yamit Guachetá, decretó el toque de queda. Las clases de los niños fueron suspendidas hasta que la Fuerza Pública indique que no habrá peligros para la población civil.
Los espectáculos públicos, como los bingos, también quedaron prohibidos hasta nueva orden.
Petro cambió la comandancia del Ejército
En medio de la crisis de seguridad en el suroccidente del país, el presidente Gustavo Petro decidió cambiar la comandancia del Ejército y ahora confiará el cargo en un mayor general que echó 20 meses atrás.
Se trata del mayor general Luis Emilio Cardozo, quien asumirá la comandancia en reemplazo del general Luis Mauricio Ospina.
El enroque fue informado en un comunicado del ministerio de Defensa. En él, indicaron que la decisión de retirar a Ospina fue del presidente Petro. Así darán reintegro a un uniformado que estaba en el retiro.
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Luis Emilo Cardozo salió del Ejército el 26 de agosto de 2022 en medio de una barrida de 40 altos mandos del Ejército que aplicó el presidente Petro. Después de 20 meses, el mismo Gobierno, le pidió al mayor general el reintegro a la institución.
El general Cardozo Santamaría es oriundo de Yotoco (Valle del Cauca) y tiene más de 35 años de experiencia en el Ejército.
Durante su carrera fue el comandante del Comando de División de Aviación de Asalto Aéreo, de la Octava División del Ejército y del Comando de Ingenieros Militares.
“Es profesional en Ciencias Militares de la Escuela Militar de Cadetes General José María Córdova, posee un magíster en seguridad y defensa, así como Altos Estudios Militares. Además, es Ingeniero Industrial y tiene formación en obras civiles y militares”, se lee en el perfil profesional del nuevo comandante del Ejército.
El general Ospina, por su parte, se va en medio de la crisis de seguridad en el suroccidente del país y con varias polémicas sobre su uniforme.
Uno de los escándalos que rodearon al general Ospina fue el aparente uso de la inteligencia militar para seguir al profesor de inglés de su esposa.
La gota que habría rebosado la copa ocurrió el pasado 30 de abril. Ese día el presidente Petro anunció la desaparición de un millón de armas y municiones de la base de Tolemaida y de la Décima Brigada en la Guajira
Las cifras que le entregaron al jefe de Estado habrían estado erradas y lo indujeron al error.
“El Gobierno nacional agradece profundamente al general Ospina Gutiérrez por su destacado servicio y dedicación al país a lo largo de sus años en la institución”, se lee en el mensaje de despedida para el saliente general.
Desde el Ejecutivo afirmaron que, el giro en la comandancia, será fundamental para fortalecer la seguridad y defensa de la nación.
Tomado de El Colombiano
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