Empresarios, comerciantes, agentes económicos e incluso vendedores informales, han optado por preservar sus reservas de la divisa americana y salir de los pesos colombianos.
Cerca de 3.800 habitantes de esta zona de frontera han sido seleccionados desde Caracas para recibir la protección contra el coronavirus.
Un caso que ha conmovido a San Cristóbal es el de una joven de apenas 20 años, gestante de gemelas. Además, en la comunidad fronteriza de La Mulera hay consternación por varias muertes seguidas.
Tras la apertura fronteriza autorizada por Colombia en junio pasado, los sectores productivos a ambos lados de la frontera piden la reciprocidad venezolana a la medida.
Argumentó que las limitaciones a la movilidad en el estado violentan los derechos de sus ciudadanos.
Algunas estructuras se derrumbaron. Tres ondas tropicales transitan sobre Venezuela, por lo que las precipitaciones continuarán.
Lo que comenzó como una oportunidad para salir del encierro por la COVID-19 se ha convertido en un espacio para la fraternidad y la solidaridad.
Algunos encuentran espacio para crecer en medio de la burocracia, las alcabalas y la extorsión, que frenan el avance del sector productivo.
La crisis, la pandemia y el cierre de fronteras han reducido la oferta local a su mínima expresión. El declive comenzó en 2014.
El diputado Freddy Bernal insiste en su aspiración de regular junto a las autoridades de Colombia los protocolos en materia de salud en la frontera.