Después de las festividades navideñas, y carnestoléndicas en algunas ciudades de Colombia, vienen dos cosas importantes para los colombianos: los procesos electorales en curso y el regreso a clases con incertidumbres fundadas.
En el primer caso, estamos prácticamente en la recta final de la justa electoral para elegir congresistas, y luego las consultas presidenciales. La elección de congresistas, el 13 de marzo, siempre ha sido importante porque cada región quiere tener gente buena que la represente y en cantidad importante para presionar la canalización de recursos económicos para obras de infraestructura -y otras- imprescindibles en los departamentos. Es bueno anotar que, aunque los senadores son elegidos por circunscripción nacional, aún seguimos con la mentalidad que nos legaron los constituyentes de 1886, en el sentido que los senadores de cada departamento representan la entidad territorial de donde son nativos.
Respecto a las consultas presidenciales, tenemos que, desde un principio, cuando se iniciaron los primeros acomodos y reacomodos -que aún continúan- salió a flote que en esta contienda presidencial ningún partido político tendría el músculo electoral suficiente para elegir solo al nuevo primer magistrado de la Nación. Entonces empezó la organización de las coaliciones. Primero la Coalición de la Esperanza, hoy conocida como Coalición Centro Esperanza, con tendencia de centro a centroizquierdismo, e integrada, entre otros, por Humberto de la Calle Lombana, Sergio Fajardo, Ingrid Betancur, Alejandro Gaviria, Jorge Enrique Robledo, Juan Fernando Cristo. Luego la Coalición de la Experiencia, hoy conocida como “Equipo por Colombia”, de tendencia centroderecha, que no extrema derecha, porque a este nivel en Colombia esa tendencia quedó en el pasado, y si de extremismos hablamos, hay que buscarlos en otras corrientes ideológicas.
En el “Equipo por Colombia” están los exalcaldes Enrique Peñalosa, Federico Gutiérrez, Alejandro Char, el senador conservador David Barguil y la exgobernadora del Valle del Cauca Dilian Francisca Toro. Dos anotaciones: primero, cuando esta coalición empezó a perfilarse, con el nombre “Una voz desde las regiones”, la integraba también el exgobernador nortesantandereano William Villamizar Laguado. Segundo, en esta coalición se esperaba el aterrizaje de Oscar Iván Zuluaga, candidato oficial del Centro Democrático -CD-, que, según entendidos, le aportaría a la coalición “Equipo por Colombia” una cantidad no despreciable de sufragios. Todo se desinfló ante la dilación de dicha coalición en responder la solicitud de Zuluaga para ingresar a sus toldas y prefirió irse solo, por ahora.
Es necesario anotar que por el hecho de haber devuelto la Corte Constitucional la personería jurídica a varios partidos y movimientos políticos, como Salvación Nacional, Nuevo Liberalismo, Partido Verde Oxígeno, Colombia Humana, etc., que tendrán que luchar por sobrevivir políticamente, las contiendas electorales este año son abiertas, con muchos actores fuertes.
Finalmente, quiero traer a colación el consejo del tratadista Jaime Vidal Perdomo. Decía que para comprender el mundo político había que conocer los rasgos fundamentales del régimen presidencial y del régimen parlamentario, la teoría de la separación de poderes, la teoría de los derechos y libertades públicas y la historia política de los países. Esto lo escribió en sus libros y pregonó en la Academia hace 43 años y es lo que está en juego en las presidenciales del 29 de mayo.
Debemos tener bien claro ese consejo porque no anhelamos hacer tránsito a un régimen presidencial autocrático y de concentración de poder. Si seguimos el consejo del profesor Vidal Perdomo tendremos un panorama despejado del subcontinente y estaremos en capacidad de tomar decisiones electorales acertadas.
