El pasado jueves 20 de mayo, en horas de la mañana, el doctor Iván Vila Casado participó a sus amigos que en horas de la tarde -05:00 p.m.-, un grupo de colegas, en sesión solemne virtual, se posesionarían como Miembros Correspondientes de la Academia Colombiana de Jurisprudencia -ACJ-, instalando de esta manera el Capítulo Cúcuta de dicha corporación, y, lo mejor, se descentraliza la entidad y deja de estar recluida en la gélida capital de la República.
Fui invitado por el académico Fernando Mayorga García a “participar” en la citada sesión solemne, donde se posesionaron Iván Vila Casado, Sandro José Jácome Sánchez, Carlos Alberto Colmenares Uribe, Darwin Gilberto Clavijo Cáceres, Angela Giovanna Carreño Navas, Débora Luz Guerra Moreno, Edgar Enrique Bernal Jáuregui, Francisco Ovalles Rodríguez, Rafael Eduardo Celis Celis, Ricardo Agudelo Sedano.
Lo importante para ser llamado a integrar estas corporaciones es tener obra publicada, para estudio actual y legado a la posteridad. Por ejemplo, he leído los libros de Iván Vila Casado: Fundamentos del derecho constitucional contemporáneo, Los límites de la Corte Constitucional y Reflexiones constitucionales; el de Sandro José Jácome Sánchez, El régimen de transición pensional, que ya está en segunda edición; los de Carlos Colmenares, El proceso monitorio en el Código General del Proceso y La nulidad de la sentencia en el Código General del Proceso; el de Darwin Clavijo Cáceres, Elementos de lógica para el razonamiento jurídico. Invito a leer estas obras jurídicas. Me alegra la presencia de Iván Vila y Sandro Jácome en la ACJ porque son amigos y pertenecen a la Academia de Historia
Aunque la tarjeta de invitación dice que “En dicho acto se instalará el Capítulo de la corporación en la ciudad de Cúcuta, …”, lo cierto es que se trata de reinstalación, porque el Capítulo ya existía, tan solo que con la muerte de sus integrantes se fue extinguiendo y no se renovó. ¿Cuál fue esa pléyade de juristas que tuvo el privilegio de pertenecer a la primera composición del Capítulo Cúcuta de la ACJ? Manuel Buenahora Gutiérrez, Víctor Manuel Espinel Blanco, Jorge Lamus Girón, Eduardo Peñuela Vargas, Alfonso Ramírez Navarro, Alfonso Rodríguez Peñaranda, Manuel José Vargas, Mario Vásquez Rodríguez y Jorge Zurek Meza.
El académico Rodrigo Llano Isaza creó el 11 de diciembre de 2016 la Red de Historiadores Colombianos -Rehicol- con asociados de toda Colombia y países vecinos, y ha sido satisfactorio pertenecer a esta Red, y entre los objetivos de Llano Isaza estaba que los miembros de las Academias y Centros de Historia regionales automáticamente pertenecieran a la Academia Colombiana de Historia en calidad de Miembros Correspondientes, con los respectivos filtros, desde luego. Su voz no tuvo eco, de pronto porque estas Academias y Centros de Historia tienen vida independiente, y en el caso de la ACJ crea Capítulos seccionales que dependen directamente de ella y con facilidad opera la automaticidad.
