En medio de la emergencia que deja la remoción en masa ocurrida en el barrio Doña Nidia, la cual se agravó el pasado domingo, la comunidad demostró que sigue unida a fin de superar la situación, y para ello organizaron una olla comunitaria en la que por medio de un almuerzo, preparado por todos, olvidaron el duro momento por el que pasan.

Con cuchillo en mano, Edwin Yesid Mancipe, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) del barrio Carlos Ramírez París, picó uno a uno los tallos del cilantro que acompañaron el sancocho que se preparó con la ayuda de la comunidad, que con poco o mucho aportó para que  muchos pudieran almorzar.

“Nosotros como barrio aledaño comenzamos una campaña para que los vecinos aportaran el granito de arena en el almuerzo, muchos llegaron con una papa, una yuca, otros con más cosas, lo importante es que se está demostrando la solidaridad que tenemos en  esta comuna”, manifestó el presidente mientras procedía a picar la cebolla que daría mejor sabor a la sopa.

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En la misma tarea se encontraba Paula Andrea Navas Sarmiento, vicepresidenta de la JAC de Carlos Ramírez París, quien vigilaba, con un gran cucharón, la sopa que hervía sobre una candente leña extraía de los ranchos, en un fogón que se instaló a pocos metros de una de las grietas que dejó la emergencia.

“Hemos venido al barrio a decirles que estamos con ellos, a acompañarlos en este proceso. Además del almuerzo, este domingo tenemos preparada una donatón en la cancha principal del barrio, en la que más personas se pueden unir para ayudar”, dijo.

Adicional al almuerzo, una emisora de la ciudad lideró una gran campaña social en la que se recolectó azúcar, harinas, arroz, entre otros alimentos que irán a las familias damnificadas.

La emergencia continúa

Mientras algunos se saboreaban la sopa, otros seguían en la tarea de extraer los bienes de las casas que quedaron en la zona de peligro, sacando colchones, camas, y otros enseres que no piensan perder en medio de la orden de desalojo que recibieron por parte de autoridades.

Si bien desde el domingo se recomendó evacuar las casas afectadas, muchas personas empezaron a  retornar a ellas, pues dicen que no tienen a dónde ir.

Una de esas afectadas es Belén Velázquez Serrano, quien ayer se encontraba, con la ayuda de vecinos, sacando algunas de las pertenencias que aún reposaban en su casa, que dejó mientras un vecino le ofreció posada, pero que se resiste a evacuar totalmente.

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“Es muy complicado porque somos cinco personas, en la casa tengo dos hijos incapacitados, un muchacho de 21 y una niña de seis años, mi otro hijo de 14 años es el único que me ayuda junto a mi esposo que es nuestro sustento. Los de Gestión del Riesgo solo nos hicieron un censo y nos informaron que teníamos que evacuar la zona, pero cómo hacemos si no tenemos para donde ir”, agregó la afectada.

Otro caso es el de Yorman Yoel Santana Lizarazo, quien el pasado domingo acató la orden de evacuar la vivienda junto a su familia, pero debido a la situación económica decidió volver a la vivienda que había adquirido hasta hace un mes.

“La verdad no hemos podido dormir, cualquier sonido nos despierta inmediatamente, debemos vigilar cómo está la casa. Decidimos dormir todos al costado derecho de la vivienda para que, de presentarse una emergencia, se pueda tener el tiempo suficiente para evacuarla, o que pase lo que Dios quiera”, mencionó.

El pequeño comerciante reconoció que, a pesar de que las empresas de servicios públicos suspendieron el suministro en las viviendas afectadas, seguirán bajo el techo de la edificación.

Se reunió el Consejo Municipal de Gestión del Riesgo 

La Alcaldía de Cúcuta, por medio de la Secretaría para la Gestión del Riesgo de Desastres, realizó una sesión extraordinaria del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo con el fin de revisar la emergencia presentada y las acciones conjuntas que se pueden realizar para mitigar los riesgos en esta zona.

“Durante la reunión se expuso la idea de poder realizar una mesa de trabajo con la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, ya que en las zonas de alto riesgo evidenciamos que la mayoría de sectores cuenta con la prestación de servicios públicos de manera permanente”, precisó Huber Plaza, secretario de Gestión del Riesgo.

Autoridades locales aseguraron que la emergencia se habría generado debido al manejo fraudulento del agua potable y el alcantarillado, los cuales provocaron una saturación sobre la ladera en una zona que había sido declarada de alto riesgo, situación que se agravó debido a la segunda temporada de lluvias que azota a la región.

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Por ahora, Gestión del Riesgo no mencionó nada relacionado con la reubicación de las familias, pues aseguran que muchas de ellas estaban en “situación de invasión”.

A hoy, los barrios que más se han visto afectados por las lluvias durante los últimos días son La Primavera, Gaitán, Las Delicias, Belén, Doña Nidia, 28 de Febrero, Alfonso Gómez, Nueva Ilusión, Antonia Santos, Magdalena, Palmeras, La Carolina y El Salado.

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