Un trago amargo quedó en la garganta de millones de colombianos luego de la caída de Colombia el domingo en la noche en la prórroga de la final de la Copa América 1-0 frente Argentina, que retuvo la corona lograda en 2021 y consiguiendo su título 16 en la historia del torneo.
La anotación del delantero Lautaro Martínez en el minuto 112 acabó con las ilusiones de los cafeteros de soñar con levantar, por segunda vez en su historia, el torneo más antiguo de selecciones.
Colombia que fue la mejor selección de la Copa no perdió porque no haya tenido el fútbol que mostró hasta la fase semifinal. Cayó porque se encontró al frente con una Argentina que sacó a relucir su experiencia, historia, pero sobre todo la ‘jerarquía’ esa que le faltó a la Tricolor de Néstor Lorenzo para creérselas de que podía superar a la Albiceleste. vigente campeona.
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El equipo de Néstor Lorenzo tuvo buenos pasajes en el partido, o mejor ‘chispazos’, pero no fue contundente como lo expresó después del encuentro Dávinson Sánchez.
Si bien Colombia mantuvo su línea de juego que la trajo hasta la final, contra Argentina no fue tan claro y profundo en su fútbol debido a que el técnico Lionel Scaloni anuló los circuitos en el mediocampo colombiano.
James a pesar de su voluntad y ganas fue referenciado al punto que tuvo que bajar hasta el fondo para buscar el balón y tratar de sacar a su equipo de la presión.
Aunque Santiago Arias hizo buen trabajo, la ausencia de Daniel Muñoz se notó y Colombia perdió demasiada salida por el sector derecho.
Arias aportó un buen rato en la proyección en ataque, pero cuando Scaloni mandó a Ángel Di María a esa zona el cuadro cafetero perdió salida y Argentina generó gran parte de su fútbol por ese lado obligando a Colombia a tomar medidas en la marca.
Ante la escasa conexión entre volantes y delanteros Néstor Lorenzo buscó a través de los cambios darle oxígeno al equipo y aguantar la prórroga para llegar a la tanda de los penaltis, pero Argentina de alguna manera no quería llegar esa instancia, convirtiendo al arquero Camilo Vargas en figura.
El arquero bogotano fue el salvador en tres jugadas claras de gol de los gauchos, hasta que apareció Lautaro Martínez aprovechando un espacio que dejaron los zagueros cafeteros para liquidar el compromiso.
A levantarse de nuevo
Al final el técnico Néstor Lorenzo no reprochó nada de sus jugadores y valoró que hicieron una gran Copa América y que intentaron ganar el torneo, pero sabía que ante Argentina no iba a ser fácil. “No es fácil jugar una final. Los muchachos sintieron un poco el esfuerzo de todo el torneo, siete partidos en 21 días”, dijo
No obstante, Lorenzo reconoció que el objetivo no era solo llegar a la final sino ser campeones para lo cual se habían preparado y darle una nueva alegría después de 23 años de sequía.
Acerca de qué les dijo a sus jugadores concluida la final, el estratega de los cafeteros manifestó que “Les dije que arriba. Perdimos, pero no lo siento como una derrota. Es algo raro. Siento que los muchachos salieron victoriosos de todo el torneo, fue uno de los que mejor jugó, fue protagonista”
Y añadió “Nosotros recién empezamos, ojalá volvamos a jugar la final próxima, ojalá nos clasifiquemos al Mundial. Orgulloso de los muchachos, se mataron, salieron con los músculos agarrotados. Hicimos un muy buen partido y después se dieron situaciones anómalas. Cosas raras para los dos. Y uno quería tener intensidad y el árbitro no lo permitía”.
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Con respecto qué pudo haber faltado al equipo para conseguir el título “Es una pregunta con respuesta muy ambigua. Era un partido en el que hacía el primer gol ganaba. Estábamos los dos equipos agotados. Le tocó a Argentina. Errores cometimos, pero no se me da para reprocharle nada a los muchachos”, afirmó.