Hace tres años, Juan Francisco Yáñez se dio cuenta que para llegar con su empresa al mercado internacional, necesitaba darle un valor agregado a sus productos. La macrorrueda internacional 55, organizada en 2015 por ProColombia, fue el escenario para este aprendizaje.
Ya un año antes de este momento, el empresario había empezado a mirar opciones en el exterior debido a la crisis en ventas que estaba ocasionando el café venezolano que estaba llenando el mercado regional.
Después de estos momentos, Yánez inició un proceso de transformación en Café Galavis, que lo llevó a enfocarse en el desarrollo del café orgánico, que hoy es uno de sus productos estrella para conquistar los mercados de Asia, Europa y América Latina.
“Tengo que diferenciarme, vender algo con un valor agregado. Vamos con el orgánico porque es un producto que va de la mano con la nueva dinámica del mercado y los consumidores, que exigen alimentos sostenibles, libres de químicos”, aseguró.
Los trabajos, que incluyeron la adecuación de la planta, la obtención de certificaciones de calidad especializadas para ingresar con mayor valor a Europa y Asia, y el desarrollaron de estudios de mercado, ya empezaron a dar resultados.
El viernes, Mauricio Paredes, empresario chileno -microtostador y comercializador en Santiago, estuvo de visita en Cúcuta para concretar el segundo negocio internacional de Galavis, el cual, hasta antes del cierre de esta edición, estaba bastante adelantado y consistía en el envío inicial de varias toneladas de café arábigo y otras de café ya procesado de la marca.
El primer negocio, que se dio como el resultado del proceso de transformación de la marca, se concretó hace unas semanas con un comercializador venezolano, buscando llegar al mercado del Caribe.
Paredes destacó la calidad de los productos de la empresa nortesantandereana y reconoció que el café colombiano está muy bien posicionado en el mercado chileno, por lo que para él es muy importante garantizar la conexión con un proveedor como Galavis.
La meta de Yáñez es que en tres años las ventas al exterior generen por lo menos el 20% de la producción total de la empresa. Por ejemplo, en esta ocasión, el proceso de transformación y el contacto con el empresario chileno se dieron dentro de espacios como la macrorrueda y las ruedas de negocios organizadas por ProColombia.
Por otro lado, en el proceso de transformación se invirtieron $150 millones, de los que el 75% fueron aportados por Innpulsa a través de una de sus líneas de trabajo enfocadas al fortalecimiento del sector exportador.