El sector constructor viene cuestionando el poco funcionamiento que ha tenido este año la oficina de Registros Públicos, decisión que afecta el proceso de inscripción de escrituras de viviendas nuevas.
Esta decisión tendrá efectos negativos en los subsidios de los diferentes programas que ha puesto a disposición de los colombianos el Gobierno Nacional.
Mateo Montebello, gerente de Camacol Cúcuta y Nororiente, resaltó que el riesgo de tener contagiados en la oficina de registros se pudo haber evitado implementando los mecanismos que existen en otras ciudades para hacer los procesos de forma digital.
En la resolución 10979, la Superintendencia de Notariado explicó que suspenderán los términos y la prestación del servicio en la oficina de registros de Cúcuta, luego de que el equipo de Seguridad y Salud en el Trabajo, adscrito a la entidad, informara el resultado positivo de dos pruebas de COVID-19.
Por lo tanto, mientras el equipo de salud no autorice la reanudación del servicio de forma presencial, en Cúcuta se suspenden la atención al público y los términos.
La decisión tomó por sorpresa al sector de la construcción que en días pasados había manifestado la necesidad de no cerrar las oficinas por vacaciones, para que los usuarios no se vean afectados por no poder inscribir los proyectos con los beneficios del Gobierno que muchos cierran su plazo este 2020.
“Los que no alcancen a escriturar en 2020, van a tener un aumento en el valor de su vivienda para el 2021. Debemos aprovechar el tiempo que resta del año para agilizar los procesos posibles”, indicó Montebello.
Ahora, las constructoras e inmobiliarias de la región quedan a la espera de que se pueda retomar la atención al público en la oficina.