La transformación de la vía Cúcuta-Pamplona en una autopista de Cuarta Generación (4G) resultó atractiva para tres consorcios -todos de origen extranjero- que presentaron sus propuestas para quedarse con el jugoso proyecto, cuyo presupuesto ronda los $1,5 billones.
“Con este proyecto se avanza en el proceso de conectar a Cúcuta con el resto del país, lo que beneficiará de manera contundente la movilidad en esta región de Colombia”, aseguró el presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, encargado de anunciar mañana al ganador de esta licitación.
Aunque hoy todo parece fácil y solo restaría esperar si son españoles, israelíes o chinos los encargados de sacar adelante esta importante obra, lo cierto es que el año pasado la iniciativa estuvo a punto de hundirse por falta de interés de los constructores.
Por este motivo, tras el fracaso de la primera licitación en mayo de 2016 -cuando no se recibió ninguna propuesta-, el Gobierno Nacional tuvo que hacer una adición presupuestal de $300.000 millones y reducir el número de kilómetros a intervenir, así como eliminar la obligatoriedad en la construcción de algunos puentes y túneles.
Con estos nuevos parámetros, los consorcios Estructura Plural, CCA Civil Colombia SAS y Sacyr Concesiones Colombia SAS, se le midieron a presentar sus propuestas y esperan este miércoles la respuesta de la ANI.
A continuación La Opinión le cuenta cuáles son estas empresas.
Sacyr, la más conocida
Sacyr Concesiones Colombia SAS, de la compañía española Sacyr, la misma que estuvo envuelta en el escándalo por el supuesto incumplimiento en los tiempos de entrega del canal de Panamá, hasta al momento ha logrado la adjudicación de tres proyectos viales 4G: Pasto-Rumichaca, Ipiales-Catambuco y la Ruta al Mar 1.
Turcos y españoles
A esta contienda también se unieron la española Cintra y la israelí Shikun, que con una participación igualitaria del 50%, conforman el consorcio Estructura Plural.
Para este caso, vale decir que Cintra es una filial de la superpoderosa multinacionacional Ferrovial, que en Colombia ha desarrollado proyectos como el de los túneles de la central hidroeléctrica de Ituango. Por su parte Cintra aprovechó los proyecto 4G de Colombia para volver a invertir en América Latina después de casi 17 años.
La compañía ya cuenta con la adjudicación de la Autopista Ruta del Cacao, que comunica a Bucaramanga con Barrancabermeja y Yondó. Sin embargo, en el historial de la empresa figuran algunos procesos e investigaciones por la contratación y ejecución de varios proyectos en España, denunció en su momento el diario El Tiempo, advirtiendo que en Colombia estaban cumpliendo con los requisitos de la ANI.
Los chinos hacen presencia
A través del consorcio CCA Civil Colombia SAS, el grupo chino CCA Civil también mostró su interés en el proyecto Cúcuta-Pamplona.
La empresa, que ya tiene participación en otras iniciativas viales en el país, hace parte de la armada internacional de la construcción, que en su poder tiene el 25% de los proyectos de cuarta generación que impulsa el Gobierno Nacional.