Una reunión de casi tres horas con el gobernador, alcaldes y líderes gremiales necesitó el presidente Juan Manuel Santos para ajustar las iniciativas económicas con las que busca enfrentar la problemática que vive Norte de Santander, especialmente en Cúcuta y el área metropolitana.
En una agenda marcada por las dificultades que está ocasionando la crisis migratoria, los ganaderos de Norte de Santander fueron los grandes ganadores de la jornada de trabajo que terminó, como de costumbre, en una presentación del primer mandatario ante la prensa para hacer un recuento de los compromisos alcanzados.
Después de un comienzo irregular, con un poco de tos a causa del agua, que como él dijo: “Se fue por el camino viejo”, Santos indicó que a partir de ahora los empresarios del departamento dedicados a la cría de ganado podrán vender carne despostada –sin huesos– a los mercados del interior del país. Claro, la carne saldrá desde Friogán.
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La noticia fue celebrada por el gremio que desde hace varios meses tiene represadas cerca de 15.000 reses, las cuales no han podido ser sacrificadas por la restricción de venta que se generó el año pasado tras los brotes de fiebre aftosa por animales provenientes desde Venezuela, que terminaron poniendo en riesgo la certificación sanitaria del país.
Andrés Hoyos, presidente ejecutivo del Comité de Ganaderos de Norte de Santander (Coganor), notablemente feliz por el anuncio, dijo que esta decisión llega en el mejor momento, pues estaban pasando por el peor de los escenarios: el aumento de la carne de contrabando con la que no pueden competir por los precios y la restricción de negociar con el mercado nacional.
Tres meses de prueba
Para llegar a este acuerdo, los ganaderos recibieron el apoyo del Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) y el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, con quienes trabajaron los últimos días para concretar los detalles.
Uno de ellos es que durante los tres primeros meses tendrán un periodo de prueba en el que recibirán un subsidio de transporte de 1.300 pesos por kilo (aproximadamente) del Gobierno Nacional, para así poder competir en el mercado nacional, especialmente en Bogotá y Bucaramanga.
Dependiendo de los clientes que puedan conseguir y de las ventas alcanzadas, se evaluará la continuidad y el monto del subsidio.
Así mismo, en los planes está que diariamente se puedan enviar 50 reses diarias despostadas (1.500 al mes), con lo que los ganaderos empezarán a sacar los animales que ya están listos para sacrificar y así poder continuar con el engorde de los novillos.
Al respecto, Hoyos indicó que como el mercado no se estaba moviendo, la preparación de nuevos animales estaba paralizada.
Otros alcances
Entre los acuerdos firmados para los ganaderos, en los que tuvo gran participación el ministro de Agricultura, Juan Guillermo Zuluaga, también figura que se la garantizará a los pequeños productores vender los excedentes de leche en épocas de producción altas, al mercado del interior.
Sobre este tema el dirigente de los ganaderos destacó que se calcula un excedente de 500.000 litros de leche en los tiempos ‘picos’ de producción, cuando el departamento llega a dos millones de litros.
