Las remesas en Norte de Santander continúan marcando una cuerva ascendente desde la masiva llegada de venezolanos a la región.
Hoy, aunque la mayor parte de los envíos de dinero no se hacen desde el vecino país, son los inmigrantes venezolanos quienes más reclaman giros en el departamento, principalmente en Cúcuta.
Según el más reciente informe de remesas del Banco de la República, al departamento ingresaron 29 millones de dólares por este concepto en el tercer trimestre de 2019, un 19% más que en el mismo periodo de 2018.
Los países desde los que más dinero fue despachado hacia esta región fronteriza fueron España (11,6 millones de dólares), Estados Unidos (8,1 millones de dólares), Chile y Reino Unido (0,6 millones de dólares).
Ronald Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, explicó que el gran reto para el Estado es que estas remesas y este movimiento económico se queden en el país en el margen de la formalidad.
Explicó que hay un gran porcentaje de remesas que no queda registradas dentro del sistema internacional, porque muchos de los inmigrantes que ingresan irregularmente por Ecuador, llegan a las casas de cambio informales y hacen transferencias a terceros por intermedio de Efecty, Baloto o almacenes de cadena como Éxito.
Sin embargo, destacó que Cúcuta se ha convertido en la despensa de los venezolanos, donde pueden llevar productos con relativa facilidad a su territorio.
Según Rodríguez, aunque no se han revelado cifras concretas del comercio, se puede afirmar que el periodo de fin de año benefició en gran medida a este sector de la ciudad.
“La migración venezolana está transformando la zona de frontera, no porque no existiera el paso, sino porque el paso ahora tiene otras connotaciones que van a hacer que Cúcuta se convierta en la primera ciudad internacional de Colombia”, explicó.
El experto propone que los venezolanos que llegan a reclamar remesas en la capital de Norte de Santander puedan acceder a un mecanismo de ahorro para que el dinero tenga una proyección a largo plazo y no solo para la compra de bienes.