Con motivo del estreno en Netflix de ‘Selena: la serie’ le contamos que pasó con la cantante de 23 años, que estaba en la cima de la carrera, pero fue asesinada el 31 de marzo de 1995, hace 25 años.
Selena Quintanilla murió desangrada después de recibir un disparo a quemarropa de Yolanda Saldívar, una de sus más fervientes seguidoras y amiga, que le destrozó la parte derecha del torso. La ambulancia llegó cinco minutos después del suceso, que ocurrió en el motel Days Inn de la ciudad tejana de Corpus Christi.
Presuntamente este hecho habría ocurrido porque la familia Quintanilla notó el mal manejo de las tiendas de moda de la cantante por parte de Saldívar; así que la despidieron, 20 días antes del asesinato.
El 30 de marzo de 1995, Selena y su esposo, Chris Pérez, se reunieron con Saldívar para que ella les entregara unos documentos. Para entonces, ella ya estaba desvinculada como presidenta del club de fans, pero aún tenía asuntos pendientes con la cantante. Selena se dio cuenta de que faltaban algunos papeles, por lo que solicitó verse nuevamente con ella al día siguiente. Saldívar accedió, pero antes le dijo a Selena que había sido víctima de una agresión sexual, por lo que fue llevada a un hospital. Allí, un médico determinó que la mujer no había sido agredida.
Selena, frustrada, llevó a Saldívar al motel donde se hospedaba para que le entregara los documentos que hacían falta. Estando allí iniciaron una discusión y así fue que Yolanda jaló el gatillo y dejó malherida a la cantante de ‘Como la flor’.
A pesar de que esta es la versión oficial de los hechos, alrededor de la muerte de la texana circulan cientos de teorías sobre las razones que llevaron a su fan a matarla.
Selena Quintanilla Pérez tenía cuatro álbumes de estudio, un Grammy por el Mejor álbum méxico-americano y estaba grabando su primer disco en inglés, Dreaming of You.
Cadena perpetua
Han pasado 25 años desde la muerte de la Reina del Tex-mex, pero el drama de este escandaloso y lamentable suceso, vuelve a dar de que hablar luego de que saliera a la luz la posibilidad de que la asesina sea puesta en libertad.
Pese a haber sido sentenciada a cadena perpetua, la autora del crimen, que actualmente tiene 60 años, podría solicitar a la Corte dentro de pocos años, el beneficio de libertad condicional bajo el argumento de buen comportamiento.
