

Antes de subir a la tarima lo antecedieron ‘Impacto Corralero, una agrupación de Sardinata y Manfred Colmenares, conjunto vallenato de Salazar de las Palmas.
Tomás Alfonso Zuleta Díaz más conocido en el mundo artístico como ‘Poncho’ Zuleta esperó impaciente el llamado que le hiciera el también cantante vallenato Lucho Rojas. A las 8:13 de la noche sonó la fanfarria y con los brazos en alto saludó al público congregado en el teatro Zulima. Los músicos se terminaron de acomodar y José Enrique ‘Coco’ Zuleta ejecutó el acordeón para dar paso a una de las gargantas más cotizadas con ‘Tarde de verano’, uno de los temas escogidos del nutrido repertorio. No llegó solo. Presentó a Carlos Alberto ‘Beto’ Zuleta, su segundo hijo y uno de los herederos de la auténtica música vallenata.
Entre canción y canción fue recordando sus inicios en esta profesión que no cambió por la Abogacía. “Es que es genético, se lleva en la sangre, de generación en generación”, dijo mientras estiraba su mano para saludar a quienes se arrimaban a la tarima para tomarse selfis. “Vengo de una familia musical en donde se cantaba por placer, se componía de una manera espontánea, sin pensar en lo económico. Se escribía poesía”. Al lado de su padre, de Lorenzo Morales y Rafael Escalona se dejó absorber por ese arte musical “que ahora han tergiversado”. ‘Poncho’ anunció que cantaría ‘Mañanita de invierno’ y se escuchó de inmediato la histeria. El ‘pulmón de oro’ prosiguió complaciendo al público que coreaba sus éxitos de todas las épocas:‘Así fue mi querer’, ‘La espinita’, ‘La sangre llama, ‘Mi hermano y yo’,‘El reconcilio’, ‘Goticas de dolor’ que dedicó al expresidente Álvaro Uribe.
En un intermedio el gobernador de Norte de Santander, William Villamizar, subió para imponerle la medalla Francisco de Paula Santander en grado extraordinario por contribuir al desarrollo del folclor colombiano. “Maestro por este teatro han pasado grandes artistas como Garzón y Collazos, Claudia de Colombia, y el turno le toca ahora a usted”, dijo muy emocionado ante las cámaras del canal TRO. También hizo lo propio el secretario de Cultura, César Rojas, quien le entregó una placa. “Estos reconocimientos los recibo con humildad y les daré aposento en mi corazón. Pero el acto no terminó ahí. ‘Poncho’ tomó de nuevo el micrófono y anunció que ‘Beto’ su hijo continuaría cantando, no porque sintiera cansancio sino porque estaba en las postrimerías de su vida musical. Y siguió recordando: “Mi padre Emiliano fue analfabeta, pero compuso lo que consideramos un himno: ‘La gota fría’, que se ha grabado en 14 idiomas, interpretada por Frank Sinatra hasta pasar por Julio Iglesias. O como diría García Márquez el día que le entregaron el Nobel de Literatura “no hay cosa más inteligente que un ignorante”, refiriéndose a mi papá”. ‘Poncho’ no se detuvo. Cantó hasta pasada las 10 de la noche y cerró verseando después de interpretar ‘Luna Sanjuanera’. En el camerino, más reposado, reiteró que ahora tiene más responsabilidad con el vallenato y por eso se convertirá en un guardián para que la poesía se siga cantando, tal como lo exige la Unesco al declararlo Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.