La angustia se ha apoderado de varios vecinos del barrio El Progreso, en la ciudadela Juan Atalaya, luego de un paseo de pesca de cinco jóvenes.
Ellos salieron con rumbo al sector La Represa, en El Zulia, pero tres, entre estos, dos menores de edad, no regresaron a sus casas.
Quienes lograron librarse de las personas que los interceptaron y los retuvieron, hoy tienen miedo y no hablan.
Ayer, en un acto de protesta y de exigencia, familiares, amigos y vecinos de dos de los tres desaparecidos, llegaron a las instalaciones de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), ubicada en el sector Corral de Piedra.
Con carteleras que contenían las fotografías de Adrián Contreras García, de 17 años, y de José Armando Uzcátegui Delgado, ambos menores de edad, gritaban que no los dejaran solos en la búsqueda.
“Nadie de las autoridades los está buscando. Estamos solos y con un dolor enorme. Lo peor es sentir la indiferencia, porque como no son hijos de adinerados, nadie mueve un dedo por ellos. Somos nosotros sus familiares y amigos a los que nos duele no saber nada de su paradero”, dijo una familiar de Adrián Contreras.
Un grito de ayuda
María Edilia Delgado, la mamá de José Armando, no deja de asegurar que su hijo está vivo. Su fe la lleva a repetir una y otra vez que volverá a verlo.
“Las autoridades nos dicen que el caso está en estudio, pero no los están buscando. ¿Es que acaso son ciegos para no darse cuenta de que son dos menores de edad que fueron violentados por hombres armados?. Ni mi hijo ni el otro muchacho tienen antecedentes judiciales, son muchachos sanos. No nos pueden dejar solos”, dijo María Edilia.
La mujer manifestó que también les pide a las autoridades que resuelvan lo ocurrido, que investiguen todo el hecho y den respuestas a las dudas sobre la retención ilegal.
Amigos y conocidos se unieron al inconformismo, al enterarse de que los cinco hombres capturados por este hecho, están libres y sin ningún requerimiento de las autoridades.
“No sabíamos que estaban libres. Si no es por la publicación del periódico ni nos enteramos de que a esas personas nadie les pidió que respondan por lo que hicieron, porque son ellos los culpables de que estemos viviendo esta incertidumbre”, dijo otra de las familiares.