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Ocaña
Hogar de los abuelos de Ocaña atraviesa crisis económica
Se ha puesto en marcha el plan padrino para ayudar a esta importante organización.
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Javier Sarabia Ascanio
Javier Sarabia
Martes, 22 de Febrero de 2022

El Hogar de los Abuelos Nuestra Señora de las Gracias de la Torcoroma de Ocaña atraviesa por una difícil situación económica y requiere de la ayuda de los buenos corazones para saldar las deudas. 


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Sandra Gentil coordinadora del Centro Vida indica que están esperando el informe final de la contadora, pero el déficit supera los 18 millones de pesos.
 
Durante la pandemia disminuyó ostensiblemente los ingresos de la estampilla pro anciano por concepto de la contratación pública y a lo anterior se suma la muerte de muchos benefactores.
 

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Ante esa situación se ha puesto en marcha el plan padrino para ayudar a esa población vulnerable, ya que las transferencias se redujeron considerablemente. 

La directivas adoptan estrategias para conjurar la crisis.
Claman una manito 

Las directivas solicitan la voluntad de las personas bondadosas para conjurar la crisis financiera. En estos momentos albergan a 34 abuelos y la mayoría se encuentra en condiciones de abandono. Muchos enfermos y se les debe suministrar medicamentos. Eran indigentes y por esa razón viven en hogar, recalca la señora Gentil.

 Asegura que la gobernación del Norte de Santander tiene pendientes unos recursos y considera que se deben consignar directamente, pero no ejecutarlo en mercados y prótesis sin hacer los estudios pertinentes como ha ocurrido años anteriores.
 
El vocal de la Junta Directiva, odontólogo Juan Pablo Portillo, indica que hay una deuda acumulada que puede llegar hasta los 30 millones de pesos y se deben buscar mecanismos para conjurar la crisis.
 

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La dificultad es que la estampilla Pro anciano se nutre con la contratación pública que ha disminuido durante la pandemia. “Súmele los altos costos de los productos de la canasta familiar. La gobernación no genera los giros y la situación es insostenible si no aparece la mano amiga”, dijo.

Los abuelos necesitan la ayuda de los corazones bondadosos.
Un salvavidas para los abuelos

La directora del hogar, hermana Mónica López Rodríguez, manifiesta que están atravesando por un momento crítico ya que el presupuesto con la carestía no alcanza para suplir las necesidades básicas.
 
“Son muchas deudas aparte de la alimentación, bendito Dios, que la gente ocañera se ha vinculado con algunos artículos de la canasta familiar, pero eso no alcanza. El costo del personal asistencial es bastante grande, adquirimos compromiso con algunos que han hecho la caridad de fiarnos algunos elementos”, reiteró.

Asegura que la situación es difícil y más los primeros meses del año cuando todo el mundo tiene muchos gastos. “Incluso el Centro Vida disminuyeron los cupos y eso ayudaba al Centro de Bienestar del adulto mayor, se reduce la cantidad de pacientes, entonces la capacidad resolutiva es menor. Ellos requieren alimentación, vestuario, elementos de aseo, medicamentos y el personal asistencial”, señala la religiosa.
 
“Todos nos entregamos desinteresadamente por ellos sin recibir nada a cambio, casi no hay vocaciones y es bastante grande el gasto en personal”, agrega.
 

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Hace un llamado a la gente para que apoye el hogar con mercados, aportes económicos, consignaciones bancarias o apadrinando a un abuelito llamando al 5623721.
 

Las hermanas de la Divina Providencia coordinan acciones en el hogar de los abuelos.
Pronunciamiento oficial

El secretario de Hacienda de Ocaña, Miguel Quintero Alvernia, explica que de acuerdo a la dinámica de los recaudos se hacen las transferencias a los abuelos.
 
El año pasado se hizo el traslado de 180 millones 778 mil pesos por concepto de la estampilla por contratación pública que corresponde al 70 por ciento para los Centros Vida y el 30 por ciento a los hogares de los Almendros y el Anciano desamparado de San Antonio que recibieron cada uno 46 millones 821 pesos.
 
Hasta junio del presente año se suscribió un convenio por 57 millones 600 mil pesos para el Centro Vida, donde se redujo de 50 a 20 abuelos de la calle para brindar la atención.

 “Las transferencias se vienen realizando a través de convenios con las estampillas Proancianos y giros directos. La fuente de financiación es un porcentaje de los distintos contratos, pero han disminuido, lo que repercute en el funcionamiento de los hogares. Son muchos los factores ya que la cofinanciación ha bajado”, agregó.
 

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Conjuntamente con la Congregación de la Divina Providencia se avanza en el análisis financiero para adoptar estrategias encaminadas a aumentar los recaudos, precisó el funcionario.

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