La falta de energía para emitir las señales de tránsito puso al descubierto el daño en el cableado de la red semafórica existente sobre la avenida Francisco Fernández de Contreras en Ocaña.

Esa práctica utilizada por consumidores de droga para vender el material en las chatarrerías y ferreterías con el fin de mitigar la ansiedad frente al vicio, pone en riesgo la vida de conductores, pasajeros y transeúntes. 
 
El secretario de Movilidad y Tránsito, Leonardo Moreno Bonilla, censuró esa modalidad y solicitó controles especiales para evitar la comercialización de esos elementos.

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El funcionario aseguró que los malhechores rompieron las líneas de conducción de energía, lo que prendió las alarmas. De inmediato, se llamó al contratista encargado de la instalación de esos aparatos y durante la inspección técnica se percataron de la desconexión.
  

Bonilla, instó a los vecinos a denunciar a los vándalos que afecta los aparatos de control vial.
 
“Esos elementos son fundamentales para la seguridad vial en una zona de alto flujo vehicular. La gente desde hace varios años venía solicitando esa estructura. Ahora deben cuidar los semáforos para evitar accidentes”, agregó.
 
La instalación tuvo un costo de 80 millones de pesos y se debe brindar la protección para el beneficio de los conductores y transeúntes.

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“Los semáforos son de gran ayuda y han disminuido los accidentes, al hacer el cruce prohibido”, indicó la vecina Martha Quintero.

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