El detonante es el nombre del candidato que tendrá el CD para ser magistrado del Consejo Nacional Electoral, tribunal al que tienen derecho por ser el segundo partido político con más votación en las elecciones de Congreso el pasado marzo.
La dura controversia se dio cuando los congresistas José Obdulio Gaviria (senador) y Jaime Hernán Prada (representante) escogieron como candidata a la magistratura a la exviceministra de justicia Viviana Manrique, y se descartó a Felipe García.
Esa decisión generó un fuerte reacción al interior porque algunos sectores consideraron que ese puesto fue coptado por el exministro del Interior, Fabio Valencia Cossio, y no quedó en un representante puro del uribismo.
Incluso el excolumnista uribista, Ernesto Yamhure, en su cuenta de Twitter cuestionó duramente a Valencia Cosio y a Manrique, a quienes llamó amantes.
“Fabio Valencia es al Centro Democrático lo que en su momento Forero Fetecua era al liberalismo. Triste que el expresidente Uribe haya dejado eso en manos de ese hampón”, escribió en un mensaje, mientras que en otro dijo que “Calidades de @vmanriquezul como magistrada del CNE: ser la moza obsecuente de Valencia Cossio”.
Esos trinos llevaron a que Valencia y su sector al interior del partido reclamaran respeto, e incluso le solicitaron al propio Álvaro Uribe que se pronunciara al respecto.
En la noche del martes, en un escueto comunicado de prensa el Centro Democrático indicó que “rechaza de manera unánime las declaraciones que atentan contra la dignidad y honra de la doctora Viviana Manrique”.
Sumado al problema de poder interno, la designación de Viviana Manrique no se podría dar por cuanto ella ejerce como abogada desde 2005, pero la normatividad que impone las condiciones para ser magistrado del CNE señalan que tiene que demostrar 10 años de ejercicio permanente del cargo. En ambos casos tanto los años de ejercicio como el tiempo de haber egresado no los cumpliría Manrique.
Igualmente se corrió el rumor, al interior, de las filas del Centro Democrático que su directora nacional Alicia Arango, había renunciado a su cargo por discrepancias políticas con Valencia Cossio.