El consumo de sustancias psicoactivas está latente en la capital nortesantandereana y uno de los propósitos del nuevo gobierno local es frenar el consumo entre los jóvenes, que hoy en día están más expuestos a caer en las drogas.

Entre las apuestas del alcalde Jorge Acevedo está el Decreto 0103 del 15 de enero de 2024, que estipula la prohibición del consumo de sustancias psicoactivas, incluida la dosis mínima, en espacios educativos, deportivos y parques.

“En las áreas y espacios descritos, no se permitirá el consumo, distribución, ofrecimiento o comercialización de sustancias psicoactivas naturales o sintéticas, inclusive la dosis personal, así como tampoco el consumo de bebidas alcohólicas, durante las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana”, se lee en el documento.

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¿Qué quiere decir específicamente? Son muchas las dudas que ha despertado este nuevo anuncio entre los ciudadanos. En La Opinión aclaramos algunas de ellas:

Espacios donde se prohíbe el consumo

Según lo plasmado en el decreto, la disposición se extiende al perímetro de espacios educativos como instituciones, jardines infantiles, guarderías, organizaciones de educación básica, primaria, secundaria, superior, técnica, tecnológica y profesional.

Espacios deportivos destinados a la actividad física y recreación como piscinas, escuelas, clubes deportivos, parques, canchas, coliseos, polideportivos, estadios o instalaciones olímpicas.

Otros de los espacios donde está prohibido el consumo son plazas, plazoletas, zonas históricas con declaración de interés cultural como bibliotecas, museos, casas de la cultura y teatros.

“Con el decreto se busca brindar espacios libres de venta y la presencia de consumidores de sustancias.Esto es una herramienta más a nuestro trabajo, cuando hablamos del consumo y distribución se hace necesario blindar estos entornos, por eso se dio un perímetro de 100 metros”, dijo el comandante encargado de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), teniente coronel Diego Díaz.

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De igual manera informó que se realizará una estricta vigilancia al microtráfico con el liderazgo de la Policía a través de actividades periódicas de control en lugares concurridos por niños y jóvenes.

Sin embargo, una de las particularidades que tiene este decreto aparte de hacer referencia a las sustancias psicoactivas es también la prohibición de la venta de bebidas alcohólicas en el mismo perímetro, lo que despierta dudas a los establecimientos que venden esos productos

El secretario de Gobierno de Cúcuta, Miguel Castellanos confirmó que estas medidas de regulación se establecen directamente sobre el espacio público, es decir, aquellos comercios que se ubican en cercanías al perímetro establecido  (tiendas, bares y establecimientos nocturnos)  podrán funcionar como lo venían haciendo, cumpliendo respectivamente las medidas ya establecidas.

“Al momento de salir de estos lugares,  ya es competencia de nosotros hacer esa veeduría y respetar los lineamientos del decreto,  lo que buscamos es cuidar a nuestros niños, niñas y adolescentes. No buscamos criminalizar a quienes consumen o beban”,  resaltó Castellanos. 

¿Qué pasa si una persona consume en un conjunto residencial?

En el caso de que una persona consuma sustancias psicoactivas dentro de propiedades horizontales, como son los conjuntos residenciales, y que esto perturbe la tranquilidad de los residentes, el decreto establece que los copropietarios pueden pedir asistencia de la Policía.

“Podrán solicitar la asistencia de la Policía Nacional dentro del marco de su competencia cuando se presenten actos perturbadores por parte de propietarios y/o visitantes con respecto al consumo de sustancias psicoactivas o bebidas alcohólicas y/o embriagantes en las áreas de las zonas comunes, con grave alteración de la normalidad”, describe el decreto.

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Al no cumplir con lo pactado por las autoridades, se impondrán sanciones según lo establecido en la Ley 1801 de 2016.

De acuerdo con el comandante encargado de la Policía, si una persona se encuentra consumiendo la dosis personal, tendrá que retirarse de este espacio.

Y en el caso de que responda con una negativa, se impondrán comparendos por desacato a una orden, según lo establecido en el Código Nacional de Policía y Convivencia.

Asimismo, se darán “incentivos a la denuncia”, como el pago de recompensas a quienes proporcionen información que permita judicializar a las personas que distribuyan o comercialicen drogas.

Si el infractor resulta ser un menor de edad, este será llevado ante el defensor o la Comisaría de Familia para adelantar otro tipo de procedimiento y garantizar el restablecimiento de sus derechos, según lo dispuesto en el parágrafo del artículo 185 de la misma ley.

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Más control y vigilancia

Para salvaguardar la integridad de los ciudadanos frente al consumo de drogas y seguridad, el alcalde Jorge Acevedo se comprometió a trasladar a las personas recluidas en las estaciones de Policía al Centro Penitenciario y Carcelario (Inpec), con el fin de descongestionar las instalaciones y permitir que al menos cien uniformados presten su servicio en el centro de Cúcuta.

“Todos irán al complejo penitenciario, como debe ser. Los policías que hoy se están ocupando, cuidando a estos delincuentes, los vamos a mandar al centro, a las calles, a los barrios, a reforzar la seguridad. Le vamos a apostar a una Cúcuta segura”, señaló el mandatario, luego del consejo de seguridad que se desarrolló el pasado miércoles 17 de enero.

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