Preocupados. Así se encuentran los habitantes de Villa del Rosario, luego de que el pasado lunes, la empresa que suministra el servicio de agua, Aqualia, informara a través de un comunicado que tuvo que suspender el suministro del preciado líquido a varias zonas del municipio histórico, porque hubo una mezcla de aguas residuales con agua potable.
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“Debido a las fuertes lluvias presentadas durante la noche del 21 de mayo en el municipio de Villa del Rosario hubo una rotura de la tubería en la obra de la carrera 7 con calle 15 de La Palmita, ya que el contratista dejó las excavaciones abiertas en el lugar, lo cual ocasionó el intercambio de aguas residuales con aguas potables”, señala el comunicado.
Según indicó la empresa, las zonas afectadas son La Parada, La Palmita (parte alta), el Megacolegio La Frontera y los conjuntos cerrados El Recreo, La Macarena, La Rayuela, Duruelos A y B, Los Mangos, Palmas Canarias, Girasoles y Hierbabuena.
Aunque Aqualia le pidió a la comunidad no consumir del líquido depositado en tanques subterráneos y aéreos de las viviendas, sugiriendo el lavado de los mismos, y se comprometió a realizar la evacuación de toda el agua del sistema y a desinfectar las redes de acueducto, la comunidad de los sectores antes mencionados se encuentra indignada, pues señalan que no les han dado una solución puntual y varias personas alcanzaron a consumir agua contaminada.
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“No se sabe cuántos metros cúbicos de agua se contaminaron y nos dicen que no podemos utilizar el agua de los tanques, pero ¿qué podemos hacer con el agua que ya se nos marcó y quién nos responde por el lavado de esos tanques?”, mencionó un residente del conjunto cerrado Los Mangos.
Los habitantes de este sector manifestaron que esto se debe tratar como una emergencia sanitaria, precisando que también se están viendo afectados los estudiantes del Megacolegio La Frontera, por lo que culpan a Aqualia y a la administración municipal por los problemas de salud que se puedan generar a raíz de esta situación.
Felipe Rojas, habitante del barrio La Palmita, señaló que desde el lunes en la mañana comenzó a notar que el agua del lavamanos de la cocina estaba saliendo sucia y con un mal olor, por lo que tuvo que comprar agua de botellón para poder cocinar y bañarse, resaltando que, hasta ayer en la mañana, no les habían dado una solución.
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“Yo vacié el tanque y estoy esperando que el agua llegue rápido, pero como llovió, no solo nos tocó agua contaminada, sino que además no hay servicio, porque hay mucha turbulencia. La última opción será comprar un carrotanque y esperar el recibo, porque el agua que se bota igual nos la cobran”, expresó Rojas.