Con la implementación de la estrategia “Vivificarte” la Unidad para las Víctimas brinda acompañamiento psicosocial a 63 mujeres para generar acciones de transformación emocional y social en medio de las secuelas dejadas por el conflicto armado.
De distintos lugares de origen y con diferentes edades, pero con algo en común, 63 mujeres víctimas de la violencia en Norte de Santander y Arauca le apuestan a la superación en medio del pasado marcado por hechos que afectaron su integridad, libertad y formación sexual.
Sus vidas cambiaron por el conflicto armado, muchas de ellas de manera forzosa se convirtieron en madres, otras vieron morir sus sueños y esperanzas por acciones de quienes fundaban temor y amenazas en medio de un conflicto armado que hoy deja un sin número de historias por contar de mujeres que, en la actualidad, promueven acciones de convivencia y reconciliación.
“La estrategia Vivificarte es una medida de satisfacción que implementamos en la ruta de reparación integral, que nos ha permitido generar una proximidad y conocer de cerca el sentido humano de estas mujeres que hoy son dignas de admirar y que, en medio de las circunstancias, han logrado avanzar en la reconstrucción de sus historias. La Unidad para las Víctimas busca con este proceso fortalecer sus proyectos de vida, recuperar y mantener la autoconfianza”, dijo la directora de la territorial de la entidad, Alicia María Rojas Pérez.
La funcionaria explicó que las jornadas se adelantaron de manera presencial en Arauca con 15 mujeres que, a través del arte y las manualidades, desarrollaron habilidades y capacidades que les permitieron reconocer sus aspectos positivos y proyectar sus planes de vida.
Lea también: Víctimas del conflicto se ‘forman para el futuro’
“Para mí fue una reflexión muy enfática a nuestras vidas, fue algo de edificación que tuvimos nosotras en ese momento, me gustó la forma en que trabajamos sobre los temas, reflexiones sobre cómo actuar, cómo identificarnos, fue algo muy especial, de verdad que ha sido de edificación para mi vida y mi hogar”, expresó Mayra*, una de las víctimas por delitos sexuales en el municipio de Arauca.
En Cúcuta y Ocaña, las jornadas se realizaron de manera virtual donde el equipo psicosocial logró generar un empoderamiento de las 48 mujeres que participaron de la estrategia en este departamento. “Contribuyeron al fortalecimiento de mi proyecto de vida, a mi identificación, a mi amor por cada una de mis capacidades y habilidades; a través de esta estrategia me fortalecí, hoy en día tengo claridad de quien soy y de muchos conceptos más”, dijo Diana*, una de las víctimas de delitos contra la integridad, libertad y formación sexual en Cúcuta.
En Ocaña, las mujeres participantes aseguraron que “Vivificarte” se convirtió en una hoja de ruta de transformación y proyección. “Aprender a mirar lo malo que nos pasó, lo que nos ha pasado con otras perspectivas y no dejar que esto nos afecte toda la vida, que nos haga daño siempre; tenemos que luchar y seguir adelante a pesar de todas las dificultades y trabas que se nos ponen a veces en la vida”, manifestó Cecilia*, otra beneficiaria de la estrategia.
Según la Red Nacional de Información, con corte al 30 de septiembre del 2020 se tiene un registro de 206 declaraciones en Arauca y 1.007 en Norte de Santander de personas víctimas de delitos contra la integridad, libertad y formación sexual en desarrollo del conflicto.
*Nombres cambiados por solicitud de las víctimas.