En Colombia la enfermedad cardiovascular es la primera causa de mortalidad, especialmente la enfermedad coronaria isquémica asociada a factores de riesgo como la hipertensión arterial, la diabetes, el tabaquismo, el sedentarismo, entre otros.
El doctor Miguel Ángel Zuleta, cardiólogo de la Clínica del Occidente aseguró que, durante la pandemia el componente proinflamatorio y protrombótico inducido por el covid-19 aumentó la prevalencia de enfermedad cardiovascular trombótica, desencadenando una epidemia de malestares del corazón.
Actualmente, la enfermedad coronaria que, debido al impacto social y a los altos índices de mortalidad se ha convertido en un problema de salud pública, tiene una mayor incidencia en los hombres, especialmente entre los 55 y 60 años de edad, pero en las mujeres mayores de 65 años la presencia de la enfermedad aumenta.
Lea también: Fitoesterol, alternativa de origen natural para el control del colesterol
“Las comorbilidades cardiovasculares en las mujeres son más agresivas y el nivel de mortalidad es mayor, sin embargo, los factores de riesgo que influyen en la vulnerabilidad de que una persona padezca este tipo de enfermedades consiste más en el consumo de tabaco, obesidad, sedentarismo, colesterol elevado y antecedentes familiares”, explicó el doctor Zuleta.
De otro lado y con lo vivido en el último año y medio de pandemia se ha demostrado que, los pacientes con enfermedades cardiovasculares tienen mayor riesgo de mortalidad ante un posible contagio por covid-19, ya que este virus tiende a comprometer órganos como el corazón, los pulmones, las arterias, entre otros.
Lea también: Cuidado con los tatuajes temporales
Consejos para prevenir las enfermedades cardiovasculares
Los especialistas coinciden en que el estilo de vida que lleva la humanidad en este momento, ante la falta de actividad física y los malos hábitos alimenticios tienden a aumentar la prevalencia de colesterol elevado, la diabetes, y las enfermedades del corazón.
No obstante, la mayoría de los factores de riesgo se pueden controlar a través de actividad física regular, sumando aproximadamente 150 minutos semanales de ejercicio, no fumar, mantener el peso ideal de acuerdo con la estatura de la persona, y asistir regularmente a controles médicos.