Inició la segunda temporada de la serie basada en la vida personal y profesional de Selena Quintanilla, una joven de Texas que deslumbraba con su voz. Sigue el desarrollo de su carrera desde sus comienzos en pequeños eventos familiares hasta su transformación en una estrella internacional de música latina.
Selena Quintanilla regresa ahora con 20 años y le quedan tres más para contar el final de su historia. La serie biográfica basada en la vida de la cantante tex-mex que se alzó en los noventa en la música latina. Volverá más independiente, emprendedora y rebelde para mostrar sus últimos años, el momento cumbre de su carrera antes de ser asesinada por la presidenta de su club de fans.
Las directoras de la serie, Katina Medina e Hiromi Kamata, han asegurado que en esta entrega se mostrará a la artista desde un perfil más personal e independiente, una versión más adulta en la que tomará las riendas de su vida, se casará en secreto y saltará del mercado de las canciones rancheras al estrellato con hits internacionales en inglés.
La segunda y última parte de la serie deja atrás a la Selena por florecer, aquella niña de Lake Jackson, Texas, de padres mexicanos que tiene que aprender a hablar español para abrirse hueco en la industria de la música latina con su privilegiada voz. También queda atrás la adolescente divertida pero siempre obediente a su estricto y ambicioso padre, un inmigrante de México que se instaló en el sur de Estados Unidos para sacar adelante a su familia. En la nueva temporada, aquella joven alcanza finalmente el reconocimiento con un disco de oro. Los sacrificios de dejar el colegio, viajar y vivir en un autobús y cantar hasta quedarse ronca empiezan a dar frutos. En los últimos tres años de su vida, Selena se enamora por primera vez y desafía los deseos de su familia, inicia una carrera en solitario y conoce a la persona que más tarde acabaría con su vida: Yolanda Saldívar, la presidenta de su club de fans y gestora de las tiendas de ropa que diseñaba la cantante.