Antonio Ledezma, exalcalde de Caracas, también reside en Madrid. Ledezma fue acusado de conspiración por el gobierno de Nicolás Maduro y estuvo preso en la cárcel de Ramo Verde hasta que escapó en 2017. Llegó a Madrid el 18 de noviembre de ese año, donde fue recibido por el entonces presidente español, Mariano Rajoy, y solicitó asilo político.
El expresidente del parlamento venezolano, Julio Borges, quien recibió el Premio Sajarov en 2017, vive en España desde 2021 tras participar en las negociaciones entre el Gobierno y la oposición en Venezuela.
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Por su parte, el general Miguel Rodríguez Torres, quien fue liberado en enero de 2023 después de años de prisión, también se encuentra en España gracias a una mediación humanitaria.
Además, los dirigentes opositores Francisco Márquez y Gabriel San Miguel llegaron a España en 2016, mientras que Lorent Saleh, expreso político, llegó en 2018 tras ser liberado por “riesgo de suicidio”.
Este domingo, un grupo de venezolanos exiliados en España se reunió en Madrid para discutir las implicaciones de la llegada de González Urrutia. Algunos optaron por la cautela, esperando declaraciones de la líder opositora María Corina Machado y del propio González Urrutia.
El director del diario venezolano El Nacional, Miguel Henrique Otero, consideró que la partida de González Urrutia a España representa un “éxito” para el gobierno de Nicolás Maduro, dejándolo como un desafío para Machado en Venezuela.
González Urrutia, quien estuvo refugiado en la embajada de España en Caracas y en la embajada de Países Bajos, enfrenta una orden de detención en Venezuela por la publicación de actas de votación que, según él, confirmaban su victoria en las elecciones, a pesar del resultado oficial que dio la victoria a Nicolás Maduro.
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