Diariamente leo el Manduco, un periódico del Departamento del Chocó. Un buen ejercicio informativo es darles vuelta a todos los periódicos del país a través de sus columnistas. Así me topé hace un mes con el inefable y célebre Odín Sánchez Montes de Oca, el diablo haciendo hostias, haciendo críticas y observaciones a la reciente visita del Señor Presidente Petro a Quibdó y al corregimiento de Noanamá del municipio deIstmina.
Era un día histórico (5 de enero) al decir de los que saben de agua, pues allí sancionó la ley 2281/23 que creó el Ministerio de Igualdad y la equidad que dejó en manos de la Señora Vicepresidente. De paso el Presidente azuzó a los mineros a la protesta, amenazando a la vez con eliminar y destruir la maquinaria de la minería ilegal y delictiva arremetiendo contra su propia gestión pública y sus empleados, al enterarse que en Quibdó no hay acueducto. Sobra agregar que tampoco ofrecióla solución.
Dos posiciones contradictorias e incongruentes, sin definiciones, que igualmente exigen los campesinos de “Marialabaja”. Una de dos; o ejecuta o elimina, como en la gota fría Escalona: p´aque se acabe la vaina.
Primero sanciona una ley como vehículo (sic) “para conducir a Colombia hacia la paz total” cumpliendo uno de los compromisos de campaña y después incitando a sus revolucionarios a los hechos violentos que se dieron de inmediato.
Entretanto, 400 municipios de los 1103 del país están en manos de los irregulares.La noticia me impresionó porque la situación del departamento del Chocó es muy parecida a la de Norte de Santander. En el Chocó los 30 municipios se asientan en el 60% de su superficie selvática y allí también se juega a la paz total con los irregulares.
Nuestra región selvática y eldesarrollo promisorio de N de S, del programa Faro del Catatumbo ocupa el 70% de nuestro territorio con 11 municipios: Ocaña, Tibú,Ábrego, Convención, El Carmen, El Tarra, La Playa, Hacarí, San Calixto, Sardinata y Teorama y los resguardos indígenas Barí y Catalauraligados a la Paz Total, en momentos de una inseguridad regional inocultable que nos encierra y nos asfixia.
Ya nadie le hace oposición al Señor Presidente,pero le pedimos que se decida por lo uno o por lo otro. Osu violencia desde el balcón, o la igualdad y la equidad; “p´a que se acabe la vaina” y deja contento a su marchante Montes de Oca.
Adenda: “Como un elefante en una cristalería, el presidente se tropieza con las instituciones” Jorge Humberto Botero.