
Un grupo de cucuteños respondió al interrogante ¿qué pasa debajo de un puente? Las respuestas, tan diferentes como divertidas, sirvieron para que un puñado de jóvenes produjera una pieza radial que hace parte del nuevo portal cultural de Cúcuta y la frontera.
La conclusión es que Cúcuta es un gran puente, una ciudad con infinitas posibilidades de intercambio cultural que se aviva al calor de la frontera y los hechos que se viven a uno y otro lado de la línea invisible que separa a colombianos de venezolanos.
La iniciativa es producto de una residencia cultural que se desarrolló en Cúcuta y finalizó ayer.
La misma tuvo como objetivo fortalecer las capacidades de creación y gestión de contenidos digitales al igual que las prácticas de trabajo colaborativo y en red de los agentes culturales de Cúcuta.
En total, 20 jóvenes participaron en la residencia, ofertada por el área de emprendimiento del Ministerio de Cultura y de la Fundación Más arte más acción, con el apoyo en el departamento de la Secretaría de Cultura, la Biblioteca Pública Julio Pérez Ferrero, el centro cultural Quinta Teresa y los laboratorios Laso.
De acuerdo con Lina Ruiz, coordinadora de la residencia Puente Lab, los participantes crearon en cinco aéreas: escritura y coordinación editorial, diseño gráfico y desarrollo web, producción audiovisual, producción de radio y gestión de proyectos culturales y circulación de contenidos digitales.
“Inicialmente se hicieron ejercicios de integración y luego se pasó al trabajo de campo y a la creación”, dijo Ruiz.
Si bien el producto final fue el portal, al que se puede acceder ingresando la dirección: www.debajodelpuente.com, Lina Ruiz manifiesta que como laboratorio prefieren pensar más en el proceso, pues se trató de un espacio de creación y de diálogo.
El nombre, debajo del puente, fue el que escogieron los 20 participantes para darle al colectivo que formaron y desde el cual seguirán alimentando la página.
Uno de los participantes, Ernesto Felipe Salcedo, músico y quien participó en el área de gestión de proyectos, dijo que fue una experiencia de creación continua y el apoyo de los tutores de Puente Lab fue fundamental.
A su vez, Carlos Alexis Bautista, del área web, dijo que todos los trabajos hechos en las cinco áreas se reunieron en un solo espacio, el portal. Al acceder al mismo se aprecia una sopa de letras y al formar palabras claves se accede al contenido.
Carlos Saladen Vargas, del área audiovisual, contó que el trabajo de ellos es un documental sobre un personaje llamado Miguel Ángel, el cual está en etapa de producción y se cargará a la página próximamente.
En radio, Kely Valles y Daniela Martínez, se divirtieron indagando sobre la frontera y las historias que transcurren en la ciudad.
Producto de ello fue una pieza radial, elaborada junto con tres compañeros más de Puente Lab.
La experiencia que vivieron los 20 jóvenes en la residencia fue enriquecedora. Al finalizar las actividades pasaron una tarde lúdica en la Biblioteca Pública Julio Pérez Ferrero y compartieron con los visitantes enseñándoles las piezas que crearon y que pueden ser observadas con detalle en la página.