
El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho. La frase, del escritor español Miguel de Cervantes Saavedra, viene como anillo al dedo para describir el trabajo de cuatro andariegos que con temple, están promoviendo la lectura en los barrios más apartados de Los Patios.
Ellos, durante tres años, trabajaron como promotores en la Biblioteca Pública Julio Pérez Ferrero, allí adquirieron las bases para trabajar con niños y se convirtieron en avezados gestores.
Este año, al no ser renovados los contratos, no quisieron apartarse de su labor.
“Nos unimos, diseñamos un plan para trabajar con niños en el municipio de Los Patios, donde la promoción de lectura es escasa. Lo más satisfactorio de las jornadas ha sido el cariño de los menores, el agradecimiento de los padres, los abrazos y la frase: cuando vuelven profe”, dijo Gilberto Pabón Sandoval, uno de los cuatro valientes voluntarios.
Junto con él están Víctor Solís, Marlene Yáñez y Ruby Caballero. Juntos, han cautivado a decenas de niños con innovadoras estrategias como los campamentos literarios.
La meta de los voluntarios es poner una semilla en el intelecto de los niños y jóvenes, aportando a la transformación social a partir de la lectura.
Ellos, como en su momento lo afirmó el filósofo Francis Bacon, están convencidos de que “la lectura hace el hombre completo, la conversación lo hace ágil y el escribir lo hace preciso”.
Estrategias lúdicas
-Campamento literario. En esta línea, de acuerdo con Gilberto Pabón, la meta es vincular a los niños y jóvenes de barrios apartados y de las veredas. A la fecha, han visitado en el área urbana los sectores Mirador, Vista Hermosa, La Esperanza y El Callejón. En la zona rural están Agualinda, Los Vados y La Garita.
“Lo que buscamos atacar es esa necesidad de acercar a las personas a la lectura. Ellos, por distancia y recursos, no pueden desplazarse hasta la biblioteca pública de Los Patios”.
La estrategia consiste en llegar a estos puntos con carpas, para que en ellas los niños puedan leer en voz alta cuentos, poesía o literatura. A la par, los voluntarios les facilitan celulares para que por medio de las nuevas tecnologías ingresen al portal del Ministerio de Cultura, Maguaré.
En www.maguare.gov.co, se ofrecen contenidos culturales para la primera infancia, buscando que los niños interactúen con más de 300 contenidos entre cuentos, canciones, videos y juegos.
-Lunada literaria. Los niños se reúnen alrededor de una fogata mientras el voluntario les narra leyendas de Norte de Santander. La meta: rescatar la tradición oral del departamento.
La sonrisa de los niños es el premio para los voluntarios, a quienes los ojos les brillan cuando los menores conocen las historias de las abuelas.
-Cine club. Con esta estrategia que también se cumple de noche, se une a las familias por medio del séptimo arte. “Hay muchos padres que por sus obligaciones laborales no comparten con sus hijos. Entonces, queremos afianzar el vínculo en los núcleos familiares”.
-Club de lectores. Gilberto cuenta que en las visitas a los barrios, generalmente, se encontraban con uno o dos pequeños que se enamoraban de un libro y lo pedían prestado. “Se los dejamos por ocho días y los sábados, nos reunimos para compartir la experiencia literaria.
-Adulto mayor. A partir de lecturas trabajamos con los adultos mayores y se comparten con ellos momentos de esparcimiento. Los abuelos se emocionan tanto que terminan contando sus historias de vida, todas cargadas de emoción.
-Manualidades. En la fundación Crecer en Familia se inculca en los jóvenes el amor por el arte y a partir de materiales reciclables se elaboran piezas artísticas.
¡Cuándo vuelven!
El sueño de los voluntarios es fundar la Corporación Cultural de Lectura y Escritura y gestionar recursos para fortalecer el trabajo.Actualmente se reúnen en la casa de Gilberto, en el barrio Videlso.
Allí programan las actividades de la semana y de lunes a jueves visitan los barrios. Los fines de semana las jornadas se intensifican.Entresemana sacan tiempo a las actividades laborales. Gilberto es mensajero; Víctor, servicios generales y de aseo, Marlene, promotora de salud y Ruby, ama de casa.
La gestión ha dado frutos y la intendente de Tránsito, Ana Saray Pabón, les apoyó para que la Policía les donará varias carpas.
Además, con una asociación de abogados, consiguieron sonido y equipo para proyectar las películas.
Los libros que utilizan en las visitas a los barrios los prestan todos los viernes en la Biblioteca Pública de Los Patios.
“Soñamos con conseguir apoyo para dedicarle más tiempo a la promoción de la lectura, a recorrer todos los barrios de Los Patios y volver periódicamente a los sitios, a compartir con los niños y aportar a la construcción de la paz en Colombia”, sentenció Gilberto.