Los alcaldes de Norte de Santander que tengan proyectos para la construcción de vivienda podrán financiarlos con el Fondo Nacional del Ahorro (FNA).
El anuncio lo hizo el presidente ejecutivo de esta entidad, Luis Augusto Posada, tras la firma de un convenio con el gobernador del departamento, William Villamizar Laguado.
El objetivo, explicó Posada, es aprovechar las facultades que tiene el FNA para apoyar a los entes territoriales en esta clase de iniciativas. De acuerdo con los primeros cálculos, se estima que se lleguen a construir 6.000 viviendas.
Sin embargo, la expectativa del ejecutivo del FNA es que cada vez más alcaldes se sumen a este plan de trabajo, en donde, además de los recursos, los mandatarios locales recibirán asesoría para la elaboración de los proyectos.
Así mismo, queda claro que el éxito del convenio depende de la voluntad política y administrativa de los 40 alcaldes del departamento, de los que hasta ahora cuatro ya manifestaron algún interés.
En el panorama regional el apoyo resulta más que necesario si se tiene en cuenta que el déficit de vivienda departamental es de 64.000 unidades, de las que 34.000 están ubicadas en el sector rural.
Frente a este tema, el secretario de Vivienda departamental, Juan Carlos Uribe, destacó que se está trabajando en un convenio con la Superintendencia de Notariado y Registro, para determinar cuántos terrenos habilitados para edificación de vivienda tiene Norte de Santander y cuáles presentan problemas jurídicos.
Tres pasos de apoyo
El acuerdo firmado con el FNA, inicialmente convoca a los alcaldes a comprar y adecuar terrenos para proyectos habitacionales.
Los montos de los empréstitos se definirán por las características de la vivienda, ya sean gratuitas, de interés social o con precios más altos. Lo que sí está claro es que para pagar la deuda, el municipio contará con 15 años, dos de ellos de gracia y un DTF que variará de acuerdo con la capacidad de endeudamiento de la administración local.
Después de tener el terreno, el FNA establecerá un préstamo con una constructora encargada de edificar el proyecto de vivienda y finalmente la misma entidad se encargará de comercializarlo con sus afiliados.
Lo importante es que al final los compradores podrán comprar una vivienda recibiendo los subsidios del Gobierno que ya existen, así como los aportes de las alcaldías o departamentos, entre ellas el subsidio por el terreno.