A veces lo olvidamos. Nos referimos a la pandemia en tiempo pasado. Muchos se han relajado en los cuidados, otros ni siquiera una vacuna se han puesto y hay quienes afirman ya no tenerle miedo.
Sin embargo, el coronavirus sigue ahí, dejando ya un récord en Colombia como el hecho que más vidas ha cobrado por encima de sucesos trágicos como El Bogotazo, la erupción del volcán Nevado del Ruiz o terremotos como los de Cúcuta y Armenia.
El Ministerio de Salud ha confirmado hasta el momento 141.820 personas fallecidas y 6.3 millones de casos confirmados de la COVID-19, mientras el número de vacunas aplicadas es de 88.7 millones de dosis.
En el caso del proceso de inmunización para poder enfrentar la enfermedad, es relevante el dato según el cual ya en Colombia se ha alcanzado el 71,83 por ciento de esquemas completos aplicados.
Volviendo al departamento, el último reporte correspondiente a la semana entre el 7 y 13 de octubre configura elementos alentadores, pero hay otros que sirven para llamar la atención sobre la amenaza latente del virus que apareció desde 2020.
En primer término tenemos, como lo expone el Instituto Departamental de Salud, un total de 124.364 casos desde cuando se detectó el primer contagiado en Norte de Santander y 5.182 fallecidos.
Un asunto alentador es que a la fecha del citado informe en 36 municipios del departamento no había casos activos, destacándose localidades metropolitanas como Los Patios, El Zulia, Puerto Santander y San Cayetano, por ejemplo.
En ese importante listado figuran, además, gran parte de la región del Catatumbo, los pueblos de occidente, gran parte de la región sur del departamento y otras provincias que por el momento no tienen la presión del coronavirus.
Los 24 casos activos a la fecha se concentran -y ahí es donde viene una de las alertas para evitar los peligros de un descuido- en Cúcuta, con 12, Villa del Rosario, que tiene 6, Ocaña que registra 4 y Pamplona 2.
Ese listado nos muestra que para esa semana la COVID-19 se concentró en las localidades con mayor número de habitantes y alto flujo de movilidad de personas.
Para las autoridades locales de salud, en coordinación con el IDS y el Ministerio de Salud, es indispensable que refuercen, en esas localidades las operaciones para la aplicación de las dosis de refuerzo y se convoque a quienes todavía persisten en negarse a vacunarse para que revisen esa decisión.
Y como siempre, el registro estadístico es uno de los mejores soportes para fundamentar las alertas, puesto que los cuatro municipios afectados todavía por el coronavirus tienen los registros más preocupantes del desarrollo pandémico.
La capital nortesantandereana, con 76.579 casos, acumula un poco más del 61 por ciento del total de contagios en el departamento y el 62 por ciento de los fallecidos (3.228), situándose luego Villa del Rosario (427 muertos y 18.790 casos), Ocaña (312 fallecidos y 9.223 contagiados) y Pamplona (222 muertos y 6.536 casos).
Todavía no es hora de cantar victoria. Recordemos que ahora llega la temporada de vacaciones de fin de año y para la región es recomendable que se eviten situaciones que puedan hacernos una mala jugada. La misma OMS sigue preocupada por los riesgos que sigue corriendo la población debido a las grandes carencias en materia de vacunación, la reducción de la vigilancia, los bajos índices de realización de pruebas y de secuenciación, y la incertidumbre acerca de las posibles repercusiones de las variantes actuales y futuras.
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