Con 11 años José Alejandro Rodríguez Peñaranda, oriundo de Ábrego, Norte de Santander, conquistó a dos de los tres jurados durante las audiciones a ciegas del concurso de canto infantil, La Voz Kids, que todas las noches se transmite en el Canal Caracol.
Vestido de traje azul claro, con su guitarra al hombro y cantando el vallenato 'Sirena Encantada', hizo vibrar el diamente del reality show.
El primero en presionar el botón rojo fue el jurado Aleks Syntek, minutos más tarde, lo hizo Greycy Rendón.
Y aunque el pequeño esperaba que el maestro Andrés Cepeda se volveara y le abriera las puertas de su equipo, no lo hizo, pero también elogió sus habilidades para tocar guitarra.
“Tocó la guitarra desde los 7 años”, dijo emocionado José Alejandro, quien además deleitó al público asistente con la canción que le compuso a su tierra natal, titulada 'Como te quiero mi pueblo'.
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“Ábrego es mi bello valle, vengo del Catatumbo, allí se oye que hay mucha violencia, pero vengo a contarles que el Catatumbo es arte y música. Cuando un niño toca un instrumento nunca empuña un arma", fue el mensaje que dio a los colombianos.
Martha Peñaranda e Iván Rodríguez, padres de José Alejandro acompañaron la presentación, quienes emocionados no podían creer que el sueño de su hijo se estuviera haciendo realidad, "cantar en La Voz Kids era el sueño de él", dijo su mamá.
José Alejandro eligió al mexicano Aleks Syntek como entrenador. "Con quien quería irme no volteó", entre risas dijo el menor.
Es una dinamita
Sara María Yaruro Quintero nació en Ocaña hace ocho años, pero vive en Valledupar, donde se ha contagiado con el vallenato que la hizo lucir en las audiciones a ciegas de La Voz Kids.
La alegría y energía hizo que el mexicano Aleks Syntek oprimiera el botón que hizo girar la silla y al verla exclamó: así exactamente como eres te imaginaba. Cuando de te empecé a escuchar no volteaba porque no es una canción para demostrar la gran voz, pero tienes una alegría increíble y me fascinó y tu voz me traspasó el corazón. Hay cantantes que no son perfectos, con la gran técnica, pero amarran, enganchan al público y tu me engachaste. Por eso te quiero en mi equipo. Eres una maravilla.
Greeicy le preguntó qué quién la acompañó y la pequeña Sara María dijo que su hermano, su compañero de música, su mamá y su papá. Cepeda invitó a su hermanito Juan José Yaruro al diamante, pero Juan José entró con los ojos inundados en lágrimas de la emoción y en vez de hablar activó las teclas y los fuelles del acordeón pusieron a bailar a los entrenadores. La ocañerita prendió la rumba vallenata. Qué bárbaro, eres una gran dinamita, reiteró Syntek y Cepeda alabó la destreza de su hermano acordeonero. “Son un equipo, geniales”, apuntó Greeicy para consolar a Juan José que no paraba de llorar.
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