Más de un centenar guerrilleros de las Farc detenidos en cárceles de Colombia quedaron libres de sus cargos este miércoles, tras un indulto firmado por el Gobierno en un gesto que inicia la liberación de unos 4.000 rebeldes.
Después de entregar el martes al Congreso la propuesta de Ley de Amnistía que permitiría la excarcelación de todos los reos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), el ministro de Justicia, Jorge Eduardo Londoño, aprobó el indulto de unos 110 insurgentes presos por rebelión y otros delitos políticos, confirmó el ministerio.
La lista es de 196 personas, según la Coalición Larga Vida a las Mariposas, una plataforma de abogados de presos políticos que participó en la mesa de conversaciones entre el gobierno y las Farc que llevó a un acuerdo de paz con la guerrilla más antigua de América Latina.
Londoño tiene previsto autorizar otros 300 indultos antes de que finalice 2016.
La Ley de Amnistía y la suspensión de las órdenes de captura de los insurgentes son el último requisito de la guerrilla para avanzar hacia una veintena de zonas rurales donde, en unos seis meses, los rebeldes dejarán las armas para convertirse en un partido político.
De acuerdo con el boceto de la nueva norma, basado en el acuerdo de paz entre el gobierno y la principal guerrilla del país, quedarían libres de cargos los presos por delitos políticos.
Aquellos condenados por crímenes graves _lesa humanidad, genocidio, crímenes de guerra y toma de rehenes, entre otros_ pasarán a disposición de la Jurisdicción Especial para la Paz, un mecanismo que prevé penas no carcelarias de hasta ocho años para quienes reconozcan su participación en el conflicto.
La ley también dará un tratamiento especial equiparable a la amnistía y el indulto para agentes del Estado condenados por crímenes en el marco del conflicto armado.
Cada uno de los indultos deberá ser revisado por un juez para proceder al levantamiento de las medidas restrictivas.