Los camioneros y buseteros de Cúcuta se adueñaron del parque Los Benefactores y la alcaldía pareciera no darse por enterada.

Al menos esta es la actitud que se  deprende de la omisión que ha tenido para retirar de allí los automotores que a diario son estacionados en el parque.

“Nos robaron el parque de frente y el alcalde Donamaris Ramírez no ha intervenido para recuperarlo, por el contrario pareciera que avalara los abusos de los conductores”, dijo Marina Rojas, vecina del lugar.

A finales de 2014, la Concesionaria San Simón construyó los sardineles que hacían falta en la avenida Camilo Daza, y con ello se pensó que los conductores desistirían de parquear sus vehículos en los andenes  y en el parque, “pero los abusos continuaron, igual siguieron ocupando el espacio público”, dijo Horacio Leguizamón, líder del sector.

El desbordado parqueo en el parque impide que los niños y los jóvenes lo empleen en la práctica de sus deportes preferidos o simplemente para ir a departir en familia, dijo el dirigente comunal.

Pero allí al igual que en el parque  de Ceiba, también están presentes los pimpineros con al menos diez puntos de venta, lo que convierte este lugar en una auténtica bomba de tiempo, “todo ante los ojos de la alcaldía”, acotó el líder.

El secretario de Gobierno, Oscar Gerardino, informó este parque está incluido en el plan que se diseñó con la Policía de Tránsito para intervenir los lugares en los que se invade el espacio público.