La parálisis que generó el paro camionero puso contra las cuerdas al Gobierno Nacional porque no sabía cómo solucionar la situación, a las familias porque cada día subía el precio de los alimentos, y a los pequeños y medianos empresarios porque no conseguían la materia prima para producir y cuando lo hacían, el costo era alto.

Los emprendedores de Cúcuta y el área metropolitana no fueron ajenos a esta realidad. En la ciudad uno de los ejemplos más fuertes sobre la escasez la vivieron las panaderías, en donde la materia prima subió hasta 50%.

Alexander Dueñas, que pasa sus días desde hace varios años entre el horno y la masa para preparar pan, explicó que pensó cerrar porque los precios “estaban por las nubes”. La harina, la mantequilla, el azúcar y todos los insumos que necesitaba, eran escasos y muy caros. Con tres empleados y una lista de costos de producción por cubrir, este empresario aseguró que si el paro duraba una semana más, tendría que cerrar, porque, o pagaba empleados o compraba los insumos, y la panadería no funciona sin ninguna de las dos.

Como él, también estaban los dueños de los restaurantes, para quienes los precios de los vegetales, las frutas, las carnes y los productos no perecederos se incrementaron , en algunos casos, más del 50%, un hecho que también afectaba directamente el bolsillo de todas las familias de la región, sin importar el estrato social, porque para todos, todo era más caro.

Ahora, con el acuerdo al que llegaron el Gobierno Nacional y los camioneros, la pregunta que todos se hacen es ¿cuándo van a bajar los precios y si van a volver al mismo precio que estaban antes del paro? Mauricio Escobar, economista de la Universidad del Rosario, dijo que los precios deberían volver a ser los mismos a medida que se normalice el abastecimiento, pero esto duraría varias semanas.

Sin embargo, se pueden presentar situaciones en las que los comerciantes con pérdidas decidan  mantener los valores altos hasta recuperar lo perdido.

Alexander Botello, economista y director del observatorio económico de la Universidad de Pamplona, aseguró que si bien se espera una reducción de los costos de los productos de la canasta básica, es muy difícil que los alimentos vuelvan a la misma franja de precios que tenían antes del paro. Además, la regulación del mercado puede durar cerca de un mes en Cúcuta, entendiendo que el aumento de la demanda de productos con las aperturas  momentáneas de la frontera, genera variaciones en el mercado, aseguró.

Así mismo, Francisco Unda, vocero regional de la Andi en Cúcuta, resaltó que con el acuerdo se normalizará, la próxima semana, la llegada de productos y enfatizó que lo más importante es acabar con la especulación de precios.

Desde el sector agropecuario, cuyas pérdidas estimadas durante los 46 días de paro fueron superiores al billón de pesos, Rafael Mejía, presidente de la Sociedad Colombiana de Agricultores (SAC), refirió que no todos los alimentos reducirán su precio, porque no todos están en cosecha.

Para Andrés Valencia, presidente ejecutivo de la Federación Nacional de Avicultores de Colombia (Fenavi), lo importante es que los colombianos se preparen para algunas semanas de incertidumbre, mientras las cargas empiezan a llegar de manera continua a todos los destinos , especialmente a zonas como Norte de Santander en donde hubo escasez de algunos productos.