María Fernanda Lizarazo Valbuena y Jesús Alberto Meza Veloza, una pareja que vivía en el barrio El Minuto De Dios, la semana pasada fue enviada a prisión, luego de que se demostrara su participación en un hecho que por poco acaba con la vida de Jesús Antonio Herrán Peña, luego de que recibiera cerca de 30 puñaladas.
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Todo se dio por una grave acusación que surgió, a forma de rumor, en el barrio, el pasado 11 de septiembre, cuando esta pareja regresó a su vivienda después de estar ingiriendo bebidas embriagantes.
“Ellos tienen un hijo y una hija, ambos menores de 10 años, y dejaron al niño cuidando a la niña para salir esa noche. Cuando llegaron, según ellos, le preguntaron a uno de sus hijos si había sido abusada específicamente por este hombre, y al parecer, la pequeña les dijo que sí, por lo que estas personas empezaron a armar un escándalo en el barrio”, explicó una fuente judicial cercana a la investigación del caso.
Otras personas que escucharon los gritos de la mujer, acusando a Jesús Herrán de cometer un abuso sexual contra su hija, llegaron a la vivienda del hombre, junto con Jesús Pérez, y lo sacó de allí para comenzar a golpearlo.
“Hermano eso eran como 4 o 5 personas los que lo agarraron primero a puños y patadas, pero luego trajeron un cuchillo y le dieron varias puñaladas y ‘puntazos’. Al tipo se lo llevaron a un pequeño lote que está al lado de una casa abandonada y casi lo matan, si es que no llega la Policía que fue alertada por uno de los vecinos, a ese tipo lo acaban a cuchillo”, dijo uno de los vecinos días después del hecho.
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Unidades de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) trasladaron rápidamente al hombre herido a un centro asistencial, y por varias semanas estuvo en grave estado de salud.
Y es que María Lizarazo estaba tan convencida del presunto abuso sexual, que fue hasta las instalaciones de la Fiscalía para hacer una denuncia contra Jesús Antonio, y, además, fue con su pequeña hasta el Hospital Universitario Erasmo Meoz para hacer un análisis y certificar que si había pasado la agresión sexual, sin embargo, el examen salió negativo.
“Ese hombre estuvo a punto de morir, tenía cerca de 30 heridas por arma cortopunzantes. Varias puñaladas fueron en los glúteos y parte de los genitales, sin embargo, en varias partes de su cuerpo existían rastros de violencia por parte de la turba que lo atacó”, aseguró la fuente judicial.
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Una vez el hombre fue trasladado por las autoridades, unidades de la Sijín, comenzaron a indagar sobre los responsables del ataque contra Jesús Herrán y durante el último mes estuvieron recopilando entrevistas, declaraciones juradas y elementos materiales probatorios.
“Se determinó que la madre (María Lizarazo) habría motivado a su pareja (Jesús Meza) para que hiriera a este hombre, y cuando se comprobó frente a un juez, se emitió una orden de captura contra y en una vía pública del barrio Los Canarios fueron detenidos por los uniformados”, sostuvo la fuente judicial.
La pareja fue trasladada a las instalaciones de la Fiscalía y luego de ser procesados por tentativa de homicidio agravado, fueron presentados ante un juez, quien les dictó medida de aseguramiento en la Penitenciaría de Cúcuta, mientras continúa el juicio en su contra.
Sin embargo, se espera que en las próximas audiencias del caso se determinen las demás personas que también atacaron a Jesús Herrán, pues según vecinos del barrio, fueron por lo menos cuatro personas.
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