La ausencia de proyectos a largo plazo hacen que fenómenos como la informalidad, el crecimiento desordenado y el mal uso de las zonas verdes, estén a la orden del día en las grandes, medianas y pequeñas ciudades de Colombia.
“La suma de buenos proyectos no representan ciudades de calidad”, aseguró Sandra Forero Ramírez, durante la conferencia ‘Ciudades de calidad’, en la segunda y última jornada de Expogestión Frontera 2015.
La directora ejecutiva de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol) indicó, durante su presentación, que se requiere una política pública de urbanismo que permita construir las ciudades correctamente.
Esto se hace necesario si se tiene en cuenta que las ciudades intermedias cada vez toman más fuerza. Además, las cifras revelan que solo las cinco principales poblaciones colombianas, concentran el 46% de la población y representan el 41% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
Sin negar la importancia del sector rural para el desarrollo del país, Forero insistió en la necesidad de mejorar las condiciones de vida dentro de las grandes urbes, en donde, en el año 2002 vivía el 75% de los hogares y las proyecciones indican que en los próximos años el índice pasará del 80%.
Problemas y soluciones
Sin lugar a duda y, como se dijo inicialmente, el principal inconveniente para el desarrollo de una ciudad es la falta de planeación. Este fenómeno tiene una relación directa con los planes a corto plazo de los dirigentes (alcaldes y gobernadores), que piensan la ciudad y la región para sus cuatro años de Gobierno y no proyectándola hacia el futuro, algo que tiene que empezar a cambiar, según señaló Forero.
A esta falta de proyección, se suman otros factores como la creciente necesidad habitacional, la escasez de suelo urbanizable, la débil articulación entre la oferta del Estado y la infraestructura urbana, además de los factores que limitan la actividad edificadora de la industria privada.
Para lograr contrarrestar estos índices, que además generan el aumento de la informalidad laboral y habitacional, es indispensable desarrollar políticas de vivienda para todos los estratos sociales (no solo para los bajos), superar los problemas de la habilitación de suelos y pensar las ciudades hacia afuera, no hacia adentro, pues esto aumenta la congestión.
Por último, la vocera de Camacol dijo que se debe tener una mirada integral de las regiones.